Las Vegas

-Hola cariño, ¿qué tal te ha ido el día en el cole?.
-Hola Mami, bien, bueno, el profe nos ha hecho escribir una redacción de lo que queríamos ser de mayor y yo, bueno yo, pues..., ya sabes..., que yo de mayor quiero ser Agente del F.B.I. y claro cuando la he leído, justo después de Jessica María que quería ser cantante de un cuarteto de hip hop, todos los niños se ha reído de mi.
-¿Y eso por qué hijo?, si ser agente del F.B.I. es una cosa buenísima que nos va a sacar a tu padre y a mi de pobres. No les has dicho que los Agentes de F.B.I. salen siempre muy bien vestidos y conduciendo coches carísimos.
-Sí, Mami, eso les he dicho, además he descrito como extraer una bala del omóplato de un hombre perfectamente, como en el capítulo de C.S.I. de la semana pasada, el que vimos con Papá.
-Pues hijo, no lo entiendo, y ¿qué ha dicho el profesor?
-Pues es por eso, que se han reído, porque cuando Raúl Pablo se he puesto a decir que en España no había agentes del F.B.I. sino que había Guardias Civiles, yo les he dicho que no que agentes del F.B.I. tiene que haber en todas partes, que si no como iban a resolver los crímenes sin todos esos aparatos tan modernos de analizar A.D.N.
-Claro hijo mío, si además eso te lo dijo tu padre, que la central del C.S.I. estaba en Guadarrama, que su amigo Luisete el del barrio trabajaba allí de portero.
-Pues eso Mami, eso mismo les he dicho, pero el profesor erre que erre, diciendo que era imposible que yo pudiera ser agente del F.B.I. y que en todo caso tendría que ser Guardia Civil, y me ha puesto como castigo escribir una redacción sobre la Benemerita.
-Jesús, estos profesores de ahora, que no os dejan ni respirar, bueno pues espera a que venga tu padre a ver si te tiene algún amigo Guardia Civil, aunque a mi me hacía más ilusión que fueras Agente del F.B.I. Anda cometé el bocadillo...